Expertos del Banco Mundial proyectan una desaceleración en la economía global por tercer año consecutivo en 2024, ubicando el Producto Interno Bruto (PIB) en 2.4%. Este pronóstico, inferior al crecimiento del 2.6% registrado el año pasado, refleja una tendencia a la baja desde el 3% alcanzado en 2022.
Aunque señalan condiciones económicas mundiales más favorables que el año anterior, destacan que la inflación seguirá siendo un desafío en economías avanzadas como Estados Unidos. La desaceleración en el crecimiento estadounidense se estima en un 1.6% para 2024, superior al 0.8% previsto en junio, pero menor al 2.5% de 2022.
En la Unión Europea, anticipan un crecimiento del 0.7%, por debajo del 1.3% pronosticado en junio, marcando una mejora desde el 0.4% de 2023. Para China, prevén un avance del 4.5%, mostrando una desaceleración desde el 5.2% del año pasado.
En cuanto a las economías emergentes, se espera un fortalecimiento general, pero con tasas aún por debajo de las prepandémicas. Los BRIC muestran un escenario diverso: India lidera con un crecimiento proyectado del 6.4%, seguida por China (4.5%), Brasil (1.5%), y Rusia (1.3%).
En América Latina, el Banco Mundial estima un crecimiento del 2.3% para 2024, ligeramente superior al 2.2% de 2023. Guyana destaca como la economía más dinámica con un 38.2%, mientras que Brasil y México proyectan avances del 1.5% y 2.6%, respectivamente.
Se advierte que las tensiones geopolíticas representan un riesgo de corto plazo para la economía global. A pesar de anticipar un crecimiento moderado en el comercio, se espera que este siga por debajo de los niveles pre-pandémicos. Respecto a la inflación mundial, se prevé una disminución gradual a medida que se debilite la demanda.
Con información de EL ECONOMISTA