El gigante petrolero ExxonMobil ha tomado la decisión de cerrar su división de exploración y producción de petróleo en México, marcando un cambio estratégico en sus operaciones en el país.
La incursión de ExxonMobil en México se remonta a la reforma energética de 2013, cuando la compañía ingresó con la intención de explorar activos petroleros en aguas profundas, una de sus áreas de especialización. En diciembre de 2016, en colaboración con la empresa francesa Total, ExxonMobil adquirió un bloque en aguas profundas en el Cinturón Plegado Pérdido, frente a las costas de Tamaulipas, una región poco explorada por Pemex, la estatal mexicana.
La colaboración tenía como objetivo la perforación del campo más profundo del Golfo de México. Sin embargo, durante el proceso de exploración, ambas compañías no detectaron la presencia de hidrocarburos significativos, lo que llevó a su retirada del bloque. Este proceso concluyó con una sanción de más de 21 millones de dólares por incumplimiento de compromisos de inversión.
Este retiro marcó un hito, ya que ExxonMobil y Total fueron las primeras petroleras privadas en abandonar uno de los bloques adquiridos durante la reforma energética. La estadounidense se quedó sin activos petroleros en México al renunciar a su única área de exploración en el país.
Años después, tras la espera de la reanudación de rondas petroleras, ExxonMobil ha decidido cerrar su división de exploración y producción en México, según fuentes de la industria. La reforma de 2013 contemplaba nuevas rondas para aquellas compañías que abandonaran activos, pero con el cese de estas, ExxonMobil se encontró sin nuevos prospectos en el país.
El cierre del negocio resultó en el movimiento de Evelyn Vilchez, anterior country manager de la división en México, quien ahora lidera las operaciones de la compañía en Brasil y Colombia, mercados que han ganado relevancia para los inversionistas tras el cierre de México.
ExxonMobil ha decidido enfocarse en su negocio de importación y comercialización de petrolíferos en México. Aunque la empresa no ha realizado cambios significativos en su portafolio de producción, algunos analistas sugieren que la incertidumbre política y los cambios en el mercado energético han influido en las decisiones de las petroleras, llevándolas a centrar sus operaciones en otras regiones.
En un contexto donde la renuncia a bloques petroleros se ha vuelto una actividad común, ExxonMobil ajusta su enfoque estratégico en México, continuando su compromiso con los combustibles fósiles en medio de un mercado en constante evolución.
Con información de EXPANSIÓN